Después de un parón de casi dos semanas debido al mal tiempo y al poco tiempo del que dispongo ahora para salir a rodar, hoy tocaba hacer al primera ruta "seria" de este año.
106kms y 1500m de desnivel con las ascensiones a Mones, La Espina y La Fallona.
Salgo de Muros del Nalón sobre las 10 de la mañana para así finalizar la ruta sobre las 3 de la tarde, ya que dan lluvia a partir de esa hora.
Los primeros kms los hago por la general, ahora vacía de tráfico desde que se inauguraron los nuevos tramos de autopista. Son kms bastante feos por una carretera llena de toboganes hasta que me desvió hacia Artedo por la antigua general.
El paisaje se vuelve más bonito y puedo ver con claridad la Sierra del Viento mientras dejo los viaductos a mi espalda. El problema es que esta zona es bastante abierta y un fuerte viento frontal me castiga con dureza.
Los primeros kms los hago por la general, ahora vacía de tráfico desde que se inauguraron los nuevos tramos de autopista. Son kms bastante feos por una carretera llena de toboganes hasta que me desvió hacia Artedo por la antigua general.
El paisaje se vuelve más bonito y puedo ver con claridad la Sierra del Viento mientras dejo los viaductos a mi espalda. El problema es que esta zona es bastante abierta y un fuerte viento frontal me castiga con dureza.
Al llegar a San Martín de Luiña, me desvío dirección a Brieves y al entrar en un valle bastante cerrado el viento apenas me molesta.
Este tramo de carretera es una pasada. El asfalto es bastante botoso y la carretera está muy sucia, pero el paisaje es tremendo, con el río haciendo meandros cada poco y los quitamiedos de piedra cubiertos de musgo. Además la sensación de soledad es enorme, sin coches, sin casas y la única compañía del murmullo del río.
Al poco llego a Arcallana y el asfalto pasa a ser perfecto, así que supongo que ya habré entrado en el concejo de Valdés. El problema es que allí el valle se abre de nuevo y el viento me vuelve a castigar terriblemente.
Tras un tramo en bajada, ataco la subida a Mones, 4kms al 6%, que se hacen bastante duros por el viento.
El paisaje de la otra vertiente es precioso, pero el viento se convierte en un huracán, y me obliga a bajar con muchísima precaución hasta que al llegar a la zona baja del valle estoy más resguardado.
Llego a Brieves y allí me desvió hacia La Espina. Los primeros 10kms son muy suaves, el típico falso llano para remontar un valle, y además aquí estoy resguardado del viento, por lo que voy descontando kms sin mayor problema.
En Castañedo empieza el puerto en si, 11kms al 4,5% muy constante, atravesando en la zona baja un bosque precioso, aunque en esta época luce poco al estar totalmente pelado.
El problema son los 5 kms finales, donde el viento, de nuevo huracanado, me da bastante guerra en algunas zonas. En alguna salida de curva me quedaba prácticamente parado ante la fuerza del viento.
Y con bastantes juramentos por culpa del viento corono La Espina, jaja.
A partir de aquí terreno muy cómodo hasta Pravia, y además ahora me iba a dar el viento de culo, como bien me indicó un cicloturista que me crucé en La Espina, jaja.
Los primeros kms de bajada de La Espina son los más bonitos, con buenas vistas del Aguión y del valle.
Gracias al viento llego a Pravia en un momento, jaja, y allí decido cruzar por dentro para ver como va la rehabilitación de la antigua azucarera.
Al salir de Pravia comienzo la subida a la Fallona, 7kms de toboganes con un par de kms al final algo más duros, que me tomo con mucha tranquilidad ya que empiezo a notar la sensación de hambre que suele preceder a las pájaras.
Así que decido subir con mucha cadencia y disfrutando de los túneles naturales que crean las ramas de los árboles.
Tras coronar La Fallona solo quedaba bajar hacia Muros, con unas vistas de la desembocadura del Nalón y de la isla de Deva realmente espectaculares.
En definitiva, gran ruta, conociendo varias zonas por las que no había rodado todavía, y con unas sensaciones magníficas casi toda la ruta.