El puerto de Cerredo, situado en el concejo de Degaña, es uno de los multiples pasos por la Cordillera Cantábrica que sirven para unir Asturias y León. En este caso se trata del puerto menos duro de todos los puertos de paso a la meseta.
Son 14,6kms de subida a una media del 3,9%, dividida en dos partes claramente diferenciadas. La primera es la clásica zona en la que se remonta un valle, en este caso el del río Ibias, con pendientes muy moderadas. La segunda parte, 5,1kms al 6,7% con pendientes muy constantes, nos llevará al collado en el que se situa la cima del puerto.
La principal característica de la subida es que se trata de una carretera totalmente rectilínea, en la que siempre iremos remontando el valle glaciar, y sólo nos encontraremos dos curvas justo al final para ganar altura por la ladera y alcanzar la cima.


La medición empieza en el cruce entre la AS-15 que viene del túnel de Rañadoiro, y la AS-212 que viene de Ibias.


Los primeros kilómetros son, como ya había comentado, de pendientes muy suaves. Apenas un falso llano con alguna rampa muy puntual.


Por una carretera ancha y en perfecto estado vamos atravesando praderas y alguna zona arbolada.



A la salida de Cerredo comienza la segunda parte de la subida. Nos restan algo más de 5kms hasta la cima.


Las pendientes son muy constantes, y se situan en torno al 6-7%.




Al fondo vemos ya la cima, que se encuentra tras las dos únicas curvas de toda la subida.
En esta zona encontraremos alguna rampa que alcanza el 10%.




Tras la primera curva podremos ver todo el valle por el que hemos ido ascendiendo.


Tras 14,6kms de ascensión coronamos el puerto de Cerredo. En la cima hay un bonito área recreativa y tendremos buenas vistas de la vertiente leonesa.









Otras dos rutas condensadas en una sola crónica. Dos rutas visitando subidas cortas, pero con rampas muy serias.

La primera ruta me acercó a Serandi, pueblo situado en la falda del Aramo. La ruta fue de algo más de 1100m de desnivel en tan solo 62kms.



Salgo de Oviedo cómodamente por la senda de Fuso. Los primeros kilómetros son muy cómodos y así puedo calentar un poco.
Desde Fuso me dirijo hacia Puerto para comenzar la subida al Tenebredo por la vertiente de Lavares.


Lo más duro de esta vertiente es el comienzo, con algo más de un kilómetro que ronda el 10% de media. Se gana altura rápidamente y en seguida queda abajo el valle del Nalón.


Hace un bochorno tremendo. Se agradece atravesar los túneles de vegetación que abundan en la primera parte de la subida.



El comienzo del puerto es duro, pero pronto se llega a Lavarejos, donde la pendiente desciende considerablemente.


Paso por al lado de Lavares cuando estoy llegando a la cima. El verde es espectacular, pero la bruma creada por el bochorno afea las fotos.


Sin mayor dificultad, a parte del calor, corono el Tenebredo. ahora me espera una bajada vertiginosa hasta el valle del Trubia.


En Proaza hace un calor bestial. A la salida del pueblo tomo el desvío dirección Serandi y comienzo la subida.


La subida es muy irregular. Alterna rampas duras con zonas más cómodas e incluso descensos.




Las vistas del valle y de las paredes del Aramo son espectaculares. Estoy disfrutando como un enano.






Cada rincón de la subida es mejor que el anterior. Ya veo Serandi al fondo y me da pena que esta subida no sea más larga, jaja.



La bajada también se disfruta. Cambia el punto de vista y vuelve a haber rincones preciosos.





De nuevo en Proaza tengo unos kilómetros de como falso llano descendente hasta Trubia. Pero el aire frontal me castiga severamente. Ésto unido al calor me deja en las últimas, jaja.


Por suerte en Trubia refresca un poco y recupero de cara a la subida a Sograndio y finalizar una ruta muy guapa para el rato libre que tenía por la tarde.






La segunda ruta me llevó a dos subidas cortas, pero muy explosivas, como son La Degollada y El Violeo. La ruta fue de 1300m de desnivel en tan sólo 67kms.



Salgo de Oviedo rumbo a Grado por la antigua general. Hasta Peñaflor el terreno es muy cómodo y llego en un momento.


En Peñaflor comienza la subida a La Degollada. Y comienza a tope, con rampas sostenidas al 15% o más.


Exceptuando un descansillo al cruzar el primer pueblo, la subida no da respiro y las rampas se sitúan en todo momento por encima del 12-13%.



Tras esos 2kms tan duros, la subida comienza a ir a escalones. Rampas al 15% con ligeros descansillos para coger aire.


Salimos del bosque, la subida se abre y las vistas de la zona central de Asturias son espectaculares.






Taras algo más de 4kms finaliza la subida y hay unos toboganes hasta el área recreativa de La Degollada.



Desde el área recreativa hasta el cruce de la carretera que viene de La Reigada todavía hay unos kilómetros de toboganes.


Desciendo de por la vertiente del Cogollo, que deja unas estampas preciosas.



De Granda me acerco hasta Santa Cruz de Llanera. Se nota que ha llovido mucho estos meses porque todos los bosques y praderas lucen un verde espectacular.


Desde Santa Cruz me dirijo hacia Brañes, donde comienzo la corta, pero durísima, subida al Violeo.



Con las piernas cargadas de haber subido La Degollada, se me hacen muy duras las rampas del Violeo, pero por suerte la subida es corta y el sofocón no dura demasiado, jaja.


Y ya sólo me queda bajar a casa, de nuevo con vistas espectaculares.